Hirsch Natur
Calcetines ecológicos y sostenibles con años de historia
Hirsch Natur tiene su particular historia. En el 1928, Franz Kloppenborg, propietario de un restaurante, fundó una fábrica de tejidos para realizar calcetines. Las primeras máquinas se colocaron en el salón de baile del restaurante, que rara vez se utilizaba en aquel entonces. En los años 80, comenzaron una colección con fibras naturales, que ha tenido crecimiento permanente desde entonces
Los materiales que utilizan son la lana, el algodón orgánico, el lino y el bambú.
Los calcetines que encontrarás en blaugab son los de lana.
La lana absorbe
la humedad
Es una fibra que evita el desarrollo de bacterias y hongos. Es ideal para largas caminatas.
La lana es la única fibra que la naturaleza ha creado para realizar tejidos. Es una fibra proteica, funciona en armonía con el cuerpo humano gracias a su similitud con el cabello humano. Puede absorber mucha humedad (hasta el 33% de su peso en seco). La superficie especial de las fibras crea estructuras voluminosas (fieltro) con muy buenas propiedades aislantes.
La superficie de la fibra, con el contacto con el sudor, se convierte en valores ácidos de PH que dificultan el desarrollo de bacterias y hongos. Este entorno hace que la piel se tense, evitando ampollas incluso en largas caminatas. Por este motivo, cuando se usan calcetines de lana, es mejor usarlos solo un día y luego dejar ventilar dos días. No hace falta lavarlos después de cada uso. De hecho, si se ventilan, simplemente es necesario lavarlos cada dos meses.
La mayoría de los detergentes para lavar son alcalinos y neutralizan el efecto mencionado, por lo tanto es recomendable lavar los calcetines de lana Hirsch con jabón o detergente para lana, y si es posible a mano.
La lana orgánica peinada de Hirsch Natur proviene de la Patagonia. Allí, las temperaturas son bajo cero. A las ovejas les va mejor este clima que el cálido y seco de Australia. Muchos de los parásitos que causan problemas en Australia no prosperan en la Patagonia. Por lo tanto, los tratamientos crueles como el Mulesing no son necesarios y, por supuesto, están prohibidos en la agricultura ecológica.
La ganadería ecológica de ovejas requiere una actitud responsable para la cría de ganado. Así pues, los agricultores ecológicos ponen énfasis en la cría saludable y apropiada para las especies en lugar de maximizar los ingresos.
Los agricultores aceptan una mayor carga de trabajo en beneficio del bienestar animal, lo que resulta en una mejor calidad de lana. Solo se usa forraje orgánico, no se permiten aditivos sintéticos. No se permiten tratamientos químicos preventivos.
Certificación
La fábrica de Hirsch está certificada para producir de acuerdo con el estándar GOTS (Global Organic Textil Standard) y con el sello más alto de Textiles, el IVN-Best. Cada año es controlada por un certificador independiente.